domingo, enero 25, 2009

Vida y destino

La mayoría de los hombres que viven en la Tierra no se proponen como objetivo definir el "bien". ¿En qué consiste el bien? ¿Bien para quién? ¿De quién? ¿Existe un bien común, aplicable a todos los seres, a todas las tribus, a todas las circunstancias? ¿O tal vez mi bien es el mal para ti y el bien de mi pueblo, el mal para el tuyo? ¿Es eterno e inmutable el bien, o quizás el bien de ayer es el vicio de hoy, y el mal de ayer se ha transformado en el bien de hoy?
¿Han asistido los hombres durante miles de años a una evolución del concepto del bien?¿Es un concepto común a todos los pueblos, a griegos y judíos, como decía el apóstol? ¿No deberíamos tener en cuenta las clases, naciones, Estados? ¿O acaso se trata de un concepto más amplio que engloba también a los animales, a los árboles, a los líquenes, como Buda y sus discípulos aseveraron? El mismo Buda tuvo que negar el bien y el amor de la vida antes de abrazarlos.
He constatado que los diferentes sistemas morales y filosóficos de los guías de la humanidad que se han ido sucediendo en el transcurso de los milenios han limitado el concepto del bien.La doctrina cristiana, cinco siglos después del budismo, restringió el mundo viviente al cual es aplicable la noción de bien: no contenía a todos los seres vivos, sino sólo a los hombres.
El bien de los primeros cristianos, que abrazaba a toda la humanidad, dio paso al bien exclusivo de los cristianos, mientras que junto a él coexistía el bien de los musulmanes, el bien de los judíos.Con el transcurso de los siglos, el bien de los cristianos se escindió y surgió el bien de los católicos, el de los protestantes y el de los ortodoxos. Luego, del bien de los ortodoxos nació el bien de los nuevos y viejos creyentes.
Y existía también el bien de los ricos y el bien de los pobres. Y el bien de los amarillos, los negros, los blancos.
Y esa fragmentación continua dio lugar al bien circunscrito a una secta, una raza, una clase; todos los que se encontraban más allá de tan estrecho círculo quedaban excluidos.
Y los hombres tomaron conciencia de que se había vertido mucha sangre a causa de ese bien pequeño, malo, en nombre de la lucha que ese bien libraba contra todo lo que consideraba como mal.
Y a veces el concepto mismo de bien se convertía en un látigo, en un mal más grande que el propio mal.
Un bien así no es más que una cáscara vacía de la que ha caído y se ha perdido la semilla sagrada. ¿Quién restituirá a los hombres la semilla perdida?
¿Qué es el bien? A menudo se dice que es un pensamiento y, ligado a este pensamiento, una acción que conduce al triunfo de la humanidad, o de una familia, una nación, un Estado, una clase, una fe.
Aquellos que luchan por su propio bien tratan de presentarlo como el bien general. Por eso proclaman: mi bien coincide con el bien general, mi bien no es sólo imprescindible para mí, es imprescindible para todos. Realizando mi propio bien persigo también el bien general.
Así, tras haber perdido el bien su universalidad, el bien de una secta, de una clase, de una nación, de un Estado asume una universalidad engañosa para justificar su lucha contra todo lo que él conceptúa como mal.
Ni siquiera Herodes derramó sangre en nombre del mal: la derramó en nombre de su propio bien. Una nueva fuerza había venido al mundo, una fuerza que amenazaba con destruirle a él y a su familia, destrozar a sus amigos y favoritos, su reino, su ejército.
Pero no era el mal lo que había nacido, era el cristianismo. Nunca antes la humanidad había oído estas palabras:"No juzguéis, y no seréis juzgados. Porque con el juicio con que juzguéis seréis juzgados, y con la medida con que midáis seréis medidos...Amad a vuestros enemigos; bendecid a los que os maldicen, haced el bien a los que os aborrecen, y rogad por aquellos que os ultrajan y os persiguen... Todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas".
¿Qué aportó a los hombres esa doctrina de paz y amor?
La iconoclastia bizantina, las torturas de la Inquisición, la lucha contra las herejías en Francia, Italia, Flandes, Alemania, la lucha entre protestantismo y catolicismo, las intrigas de las órdenes monásticas, la lucha entre Nikón y Avvakum, el yugo aplastante al que fueron sometidos durante siglos la ciencia y la libertad, las persecuciones cristianas de la población pagana de Tasmania, los malhechores que incendiaron en África pueblos negros.
Todo esto provocó sufrimientos mayores que los delitos de los bandidos y criminales que practicaban el mal por el mal...
Ése es el terrible destino, que hace arder al espíritu, de la más humana de las doctrinas de la humanidad; ésta no ha escapado a la suerte común y también se ha descompuesto en una serie de moléculas de pequeños "bienes" particulares.


Vasili Grossman
"VIDA Y DESTINO"

(Por gentileza de Lechuza)
...

12 comentarios:

niebla dijo...

Chato: un día te vas herniar transcribiendo estas parrafadas...

Anónimo dijo...

Por cierto, el 31 de Enero se celebra el Dí Mundial del Traje de Gorila.
¿Cómo lo vamos a celebrar?

Anónimo dijo...

Coyote,no constituye ningún esfuerzo transcribir algunas cosas, además así practico un poco cosa que nunca viene mal.
Gracias por realzar las reflexiones de Grossman.
En cuanto al Día Mundial del Traje de Gorila, quedo pendiente de lo que nos digas para celebralo juntos, je,je,je...
Besos

Anónimo dijo...

Be water.Simplemente fluye.

Anónimo dijo...

Ya salió el Tao Te Ching a relucir...
Pero debéis saber que el verdadero "camino" es imposible describirlo con palabras (Lao Tse dixit).
Como recordaréis, fue mi libro de cabecera en Nepal. Junto con la Lonely Planet, claro, je, je...

Anónimo dijo...

Un beso para Pepa y Santi en estos difíciles momentos.
Salud

Anónimo dijo...

Recibimos con cariño y emoción los saludos destinados a Lobo y Pepa.
Namaste

Anónimo dijo...

El próximo miércoles debemos quedar para ir organizando el festival.
Deberíamos ir a Alcalá para saludar a Fernando Barbero e ir planificando alguna cosa.

Anónimo dijo...

La vida y el destino nos dicen que debemos ir a Alcála, a ser posible el próximo miercoles

Anónimo dijo...

Coyote, son chulísimas las fotos que nos has enviado de Monte Perdido.
Sukram
...
Estoy de acuerdo, el próximo miércole debemos ir a Alcalá de Henares.
Saludos

Anónimo dijo...

El falso mito de Roma.
Adriano La Regina, ex superintendente arqueológico de Roma y profesor de etruscología, ha hecho público lo que los expertos ya sabían:la Lupa Capitolina, la mítica loba que amamantó a los supuestos fundadores de la Ciudad Eterna, los gemelos Rómulo y Remo, no es una escultura estrusca del siglo V a. C., sino una obra medieval del siglo IX.El dato se conoció en el año 2000 cuando, al restaurarla, se descubrió que había sido fundida mediante una técnica característica de la Edad Media. Las figuras de Rómulo y Remo fueron añadidas en 1471, hecho que ya se conocía.

Anónimo dijo...

Yo también había leído algo sobre el fraude de la Loba Capitolina y me alegro de que haya sido desenmascarado. Siempre es bueno detectar este tipo de engañifas en el Arte, en la Política y en la Vida, en general.
Dios mío... ¿Dónde vamos a llegar? Las esculturas romanas ya no son romanas, los goyas ya no son goyas.
Así, acabaremos perdiendo la ESPERANZA.